lunes, 20 de mayo de 2013

Un refugio entre libros

Viajar, conocer vidas, experiencias, filosofías, consultar datos, teorías, ver imágenes, ilustraciones, aprender idiomas, saber tus derechos, todo en un libro. Las bibliotecas pueden ser, por ende, como las describió Jorge Luis Borges “algún tipo de paraíso”. Y cada vez más, los andaluces están descubriendo en estos edificios algún tipo de salvación, y no solo intelectual o formativa, también física. La calefacción o los aseos se han convertido en un reclamo más para los ciudadanos. En los últimos cuatro años, en plena crisis económica, las ocho bibliotecas públicas provinciales andaluzas han registrado un aumento de un 50,6% de usuarios. Han pasado de tener 249.185 clientes a 375.212.

“Los desempleados y los inmigrantes son, junto a los indigentes, nuevos usuarios que se suman a los estudiantes, investigadores, jubilados, menores y aficionados a la lectura que tradicionalmente llenan las salas”, concluye Javier Álvarez, director de la Biblioteca Pública de Andalucía.

 “Las bibliotecas son centros democráticos por excelencia, sobre todo ahora, que cada vez se limitan más los servicios públicos. Aquí, en un mismo edificio puede encontrarse un mendigo que viene a leer, con un empresario millonario que viene a una presentación”, cuenta Ana Isabel Fernández, directora de la biblioteca Infanta Elena de Sevilla, que ha sido el centro que más ha crecido en usuarios en Andalucía en los últimos cuatro años con un alza del 154% hasta llegar a 88.739 en 2012 desde los 34.924 en 2007.

Fuente: elpais.com

No hay comentarios: